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El polen fresco ecológico de alcornoque se obtiene de las flores del Quercus suber, el emblemático árbol que habita las dehesas mediterráneas. Las abejas lo recolectan en primavera, en ecosistemas biodiversos donde apenas hay actividad agrícola intensiva. De sabor suave y ligeramente dulce, es ideal para quienes se inician en el consumo de polen fresco.
En VerdeMiel lo envasamos y congelamos el mismo día de recolección, sin mezclas ni tratamientos artificiales, para conservar su frescura, enzimas activas y perfil nutricional completo.
Este polen destaca por su contenido equilibrado en carbohidratos complejos, proteínas vegetales, minerales como zinc e hierro, y vitaminas del grupo B como la B1 (tiamina), que apoya el sistema nervioso. Su textura húmeda y su aroma vegetal lo convierten en un alimento funcional apto para personas activas, convalecientes o en épocas de estrés.
Recomendamos una cucharada sopera al día, preferiblemente por la mañana. Puedes consumirlo solo, con miel, yogur natural o en smoothies. Por su sabor delicado, también se integra bien en recetas frías como cremas, gachas o ensaladas.
Evita calentar el polen fresco para preservar su valor nutricional. Consérvalo siempre en el congelador: cada barqueta puede durar semanas si se manipula correctamente.
Nuestras colmenas están ubicadas en alcornocales certificados como ecológicos, alejados de pesticidas y fertilizantes sintéticos. Estos entornos no solo aseguran un polen limpio y nutritivo, sino que también respetan los ritmos de la colmena y la biodiversidad local.
VerdeMiel cuenta con el aval de CAAE (Comité Andaluz de Agricultura Ecológica), cumpliendo los más altos estándares de sostenibilidad y control de calidad.
Proviene del Quercus suber, el alcornoque mediterráneo, cuya floración primaveral ofrece abundante polen. Este árbol forma parte de los ecosistemas de dehesa, donde nuestras abejas recolectan el polen en entornos ecológicos, ricos en biodiversidad y libres de tratamientos químicos.
Tiene un sabor suave y ligeramente vegetal, con un toque dulce muy sutil. Es menos intenso que otras variedades como el de castaño o estepa, lo que lo convierte en una excelente opción para quienes buscan introducirse en el consumo de polen fresco sin sabores fuertes.
Aporta energía sostenida, mejora la digestión gracias a sus enzimas naturales y refuerza el sistema inmunológico por su aporte en zinc, hierro y antioxidantes vegetales. También puede ayudar a mantener el equilibrio del sistema nervioso, gracias a su contenido en vitamina B1.
Se recomienda una cucharada al día. Puedes tomarlo solo, con miel o mezclado en recetas frías. Siempre debe conservarse en el congelador y extraerse directamente en cada toma. Así mantiene todas sus propiedades intactas durante semanas o meses.
Sí. El polen fresco conserva enzimas vivas, probióticos naturales y una textura húmeda que el seco pierde durante el proceso de deshidratación. Además, su perfil nutricional es más completo y su sabor más auténtico. Es ideal para quienes buscan un alimento funcional con mínima transformación.
El polen fresco ecológico se envasa en barquetas cómodas y reutilizables que protegen el producto frente a la humedad, el aire y la oxidación. Así se conserva sin aditivos ni conservantes, manteniendo su valor nutricional intacto desde la colmena hasta tu mesa.
Para conservar el polen fresco correctamente, debes guardarlo en el congelador nada más recibirlo. Gracias a su bajo contenido en agua, no se congela en bloque y puedes sacar la ración diaria sin problema y tomarlo directamente. Si prefieres activar su fermentación natural (proceso probiótico), puedes extraer la cantidad para los próximos 4 o 5 días y dejarla en un recipiente tapado (pero no hermético) en el refrigerador.
No se recomienda mantenerlo más de una semana fuera del congelador, ya que podrían proliferar microorganismos que afecten a su sabor y calidad. Con un almacenamiento adecuado, el polen conserva durante meses sus propiedades vivas, su textura original y ese sabor floral característico.
Consulta aquí más detalles sobre cómo conservar el polen fresco.
Tu polen fresco ecológico se envía en tres barquetas individuales, envasadas al vacío y protegidas. Gracias a su bajo contenido en humedad y a nuestro sistema de conservación, puede permanecer varios días fuera del congelador sin perder propiedades durante el transporte.
Para garantizar que lo recibes en condiciones óptimas, realizamos los envíos de lunes a miércoles, sobretodo en periodo de calor, evitando así que el producto quede en tránsito durante el fin de semana. Al recibirlo, simplemente colócalo en el congelador para mantener toda su frescura.
Envío gratuito a partir de 36 € en España penínsular. Para envíos a otros destinos, puedes escribirnos a: info@verdemiel.es.
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