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¡Disponible sólo en Internet!
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El polen fresco de jara es un producto natural recolectado por las abejas a partir de flores silvestres del género Cistus, especialmente abundantes en los paisajes mediterráneos de Andalucía. Su color ámbar-anaranjado y su sabor floral con un toque resinoso lo hacen fácilmente reconocible entre otras variedades.
En VerdeMiel lo recolectamos, congelamos el mismo día y envasamos sin mezclarlo con pólenes de otras flores, para conservar su perfil nutricional y aromático intacto. Este cuidado nos permite ofrecerte un polen monofloral, crudo y ecológico, sin aditivos ni tratamientos industriales.
Gracias a su riqueza en compuestos fenólicos, este polen ayuda a combatir el estrés oxidativo, favoreciendo la protección celular y el equilibrio inmunológico.
Contiene todos los aminoácidos esenciales, lo que lo convierte en un recurso valioso para dietas sin carne o con mayor desgaste físico.
El proceso artesanal de conservación en frío permite mantener activos los fermentos naturales, que pueden favorecer la digestión y el equilibrio intestinal.
Su combinación de carbohidratos, vitaminas del grupo B y minerales esenciales proporciona una fuente de energía natural y equilibrada para afrontar el día.
Puedes consumir el polen fresco directamente o incorporarlo en recetas dulces o saladas. Algunas ideas:
Se recomienda empezar con media cucharadita al día e ir aumentando hasta una o dos cucharadas soperas. Una barqueta puede rendir entre 20 y 30 dosis, dependiendo del uso.
El polen fresco conserva su humedad natural y debe mantenerse congelado. El polen seco, al deshidratarse, pierde parte de sus enzimas y bacterias beneficiosas.
El fresco es más suave y aromático, mientras que el seco tiene una textura crujiente y un sabor más neutro.
El polen fresco ofrece mayor biodisponibilidad de nutrientes, especialmente enzimas, vitaminas sensibles al calor y fermentos vivos.
En VerdeMiel solo recolectamos polen crudo de temporada, procedente de parajes limpios y floraciones espontáneas. Nuestro polen de jara:
Si haces cuentas, una barqueta puede durarte un mes. Comparado con otras fuentes de proteína vegetal o suplementos, el precio del polen fresco de jara es competitivo y sostenible, con el valor añadido de ser un alimento vivo, ecológico y local.
“Desde que lo tomo en el desayuno, noto más energía y mejor digestión. Su sabor es diferente al de otros pólenes, ¡me encanta!”
– Laura G., cliente de VerdeMiel
El polen fresco debe conservarse congelado desde su recolección. En VerdeMiel lo envasamos directamente en origen y lo mantenemos siempre en frío para preservar sus propiedades. Una vez recibido, guárdalo en el congelador. Puedes coger cada dosis directamente sin necesidad de descongelar toda la barqueta.
El polen fresco de jara tiene un sabor floral intenso, con matices dulces y terrosos. Su textura es suave y húmeda, lo que lo hace agradable al paladar. Es ideal para quienes buscan una experiencia sensorial diferente dentro de los superalimentos naturales.
Una barqueta de polen fresco de jara puede durar entre 20 y 30 días, dependiendo de la dosis diaria. Al ser un alimento concentrado, basta con una o dos cucharadas al día. Si la mantienes congelada y la manipulas correctamente, conserva todas sus propiedades durante meses.
El polen fresco mantiene la humedad, enzimas vivas y probióticos naturales que se pierden al deshidratar el polen seco. Esto le da mayor valor nutricional y un sabor más intenso. Además, su textura es más suave y se integra mejor en preparaciones frías como batidos o yogures.
El precio del polen fresco de jara depende del formato. Puedes adquirir una barqueta individual o aprovechar el pack de 1 kg que ofrece mejor precio por dosis. Teniendo en cuenta su valor nutricional y duración, es una opción económica frente a otros superalimentos o suplementos proteicos.
El polen fresco ecológico se presenta en una barqueta de plástico reutilizable y hermética, diseñada para protegerlo de la humedad y la oxidación, asegurando así la conservación de todas sus propiedades nutricionales sin necesidad de aditivos ni conservantes.
Para mantener su frescura y beneficios intactos, es imprescindible guardarlo en el congelador al recibirlo. Gracias a su bajo contenido de humedad, no se congela en bloque y se puede consumir directamente sin necesidad de descongelación. Sin embargo, para reactivar su actividad probiótica, se recomienda extraer la cantidad necesaria para los próximos 4 o 5 días y guardarla en un recipiente abierto en el refrigerador. No se aconseja mantenerlo en el frigorífico por más de una semana, ya que podría perder algunas de sus propiedades.
Un almacenamiento adecuado garantiza que el polen conserve su sabor, frescura y beneficios, ofreciéndote un superalimento de máxima calidad, listo para integrarse en una alimentación saludable y equilibrada.
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El polen llegará directamente a su casa, empaquetado al vacío y en un sobre. Gracias a nuestro sistema de manipulación, el polen puede permanecer varios días fuera del congelador. Realizamos los envíos de este producto de lunes a miércoles para asegurarnos de que le llegue directamente.
Envío gratis a partir de 36€ en España peninsular. Consultar por mail para otros lugares.
info@verdemiel.es
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